viernes, 29 de agosto de 2008

Ojalá fuera chistóloga

Me gustan los chistes; a quién no, si la mayoría de las veces nos hacen reír hasta hacernos pipí.
Pero cuando me cuentan uno y es digno de masificarlo, lo cuento y sas ! ya se me olvidó. Lo peor es que cuando es el momento de demostrar mi gracia y contar algún chiste, no me acuerdo de ninguno. Y ahí queda la Catalina, fome porque no se sabe ninguno =(

No hay comentarios: