sábado, 28 de julio de 2007

Un vestido y un amor


Te vi
juntabas margaritas del mantel
ya sé que te traté bastante mal
no sé si eras un ángel o un rubí
o simplemente te vi
te vi
saliste entre la gente a saludar
los astros se rieron otra vez
la llave de Mandala se quebró
o simplemente te vi
todo lo que diga está de más
las luces siempre encienden en el alma
y cuando me pierdo en la ciudad
vos ya sabes comprender
es solo un rato no más
tendría que llorar o salir a matar
te vi, te vi, te vi
yo no buscaba a nadie y te vi
te vi
fumabas unos chinos en Madrid
hay cosas que te ayudan a vivir
no hacías otra cosa que escribir
y yo simplemente te vi
me fui
me voy de vez en cuando a algún lugar
ya sé, no te hace gracia este país
tenías un vestido y un amor
y yo simplemente te vi

Escaso el tiempo


La verdad es que si he pensado en que necesito un tiempo para mí. Un descanso urgente, pero cada momento libre que tengo lo utilizo en pensar en un próximo panorama; es tan larga la lista de cosas por hacer pero tan escaso el maldito tiempo.
Cuando toca un día de relajo, me llevo el resto de la semana pensando en cómo pude haber desperdiciado un día en nada! ; se nos acaba el tiempo y yo botando las horas así como si nada.
Creo que me he tomado eso del ''el tiempo es oro'' demasiado enserio, y cuando digo DEMASIADO es porque realmente es DEMASIADO.
Ahora estoy en casa, sola, pensando en que perdí un hermoso día de sol invernal, de esos escasos, casi milagrosos. Talvez mi cama, mi almohada y mi scaldasonno sean el mejor consuelo.